Traductor

¿Qué es?



El trastorno obsesivo -compulsivo , conocido como TOC, se caracteriza porque el sujeto padece una serie de obsesiones y compulsiones . Antes de empezar a describir de manera detallada los tipos de TOC que existen hoy en día y los cuales está recogidos en el DSM IV  es  hay que abordar los siguientes términos:

-Obsesiones: pensamientos o ideas que invaden la conciencia y son vividos como repugnantes o sin sentido. El enfermo realiza intentos para ignorarlos o suprimirlos, a veces sin conseguirlo. Es entonces cuando se ponen en marcha las conductas compulsivas encaminadas a reducir la ansiedad motivada por la obsesión.

-Compulsiones:  son conductas repetitivas, generalmente "caprichosas", y aparentemente finalistas que se realizan según determinadas reglas de forma estereotipada y cuya principal función es reducir la ansiedad provocada por la obsesión.

El trastorno obsesivo-compulsivo incluye pensamientos ansiosos o rituales que se cree no poder controlar. Si padece este trastorno puede encontrarse atrapado por imágenes o pensamientos persistentes y no deseados o por la urgente necesidad de realizar ciertos rituales.
Es posible que la persona se obsesione por los gérmenes o la suciedad, por lo que lavará sus manos una y otra vez; o sentirse lleno de dudas y necesite verificar las cosas repetidas veces. También son posibles pensamientos frecuentes de violencia y miedo a herir a personas cercanas. Puede pasarse mucho tiempo tocando o contando cosas o sentirse preocupado por el orden y la simetría, incluso pueden sobrevenir pensamientos de realización de actos sexuales que le resulten repugnantes o ser atacado por pensamientos que van en contra de sus creencias religiosas.
Estas imágenes o pensamientos se denominan obsesiones y los rituales que se realizan para tratar de prevenir o zafarse de ellos, compulsiones. No existe placer alguno en la realización de estos rituales, sólo un breve alivio de la ansiedad que crece cuando no se llevan a cabo.

Los trastornos obsesivo-compulsivos afectan alrededor de 3,3 millones de adultos americanos y se presenta por igual en hombres y mujeres; por lo general aparece en la niñez, adolescencia y en los primeros años de la madurez. Un tercio de los adultos con este trastorno informan haber tenido sus primeros síntomas cuando eran niños. El curso de la enfermedad es variable –los síntomas se pueden presentar y después marcharse, pueden disminuir a través de los años o pueden agravarse. La investigación sugiere que este trastorno podría presentarse en la familia.

Muchísimas personas sanas quizá se identifiquen con alguno de los síntomas relatados anteriormente, como comprobar el horno varias veces antes de irse de casa. Pero para las personas afectadas con el trastorno obsesivo-compulsivo, dichas actividades ocupan por lo menos una hora al día, son muy estresantes e interfieren con la vida diaria del individuo.
La mayoría de adultos con estos trastornos reconocen que su actitud no tiene sentido, aunque no pueden parar de hacerlo. Algunas personas, sin embargo, particularmente niños, pueden no darse cuenta de que su comportamiento no es común.

Muchas de las personas que padecen el TOC sienten mucha oscuridad en su interior puesto que constantemente sus pensamientos pueden ir desde matar incluso a sus propios hijos aunque ellos no quieran es como si algo de un poder superior les mandase ese pensamiento y el encargado de esto es el trastorno obsesivo compulsivo que vive cada uno de los sujetos.